La ONU publicó su Índice de Desarrollo Humano para el 2020, y junto con él, un ránking anual de 189 estados soberanos elaborado por el Programa para el Desarrollo de las Naciones Unidas.
Este ranking tiene en cuenta factores como la expectativa de vida al nacer, la media de años de escolaridad de cada persona y los ingresos brutos per cápita. Como país número uno aparece Noruega siendo el mejor país para vivir.
Su sistema de salud universal de financiamiento público (utiliza un 10,4% de su PBI), que le permite a cada habitante contar con chequeos y ayuda profesional permanente, le propinó el primer lugar.
Luego quedó Irlanda, considerado uno de los países más seguros del mundo, y con una esperanza de vida similar a la de Noruega, en un poco más de 82 años, pero con aún mayores ingresos per cápita.
Tercero quedó Suiza, con una expectativa de vida de 83,8 años y en donde cada ciudadano tiene un poder adquisitivo que se cuenta entre los más altos del mundo, cerca de otras naciones como Liechtenstein, Qatar, Singapur y Luxemburgo.
El cuarto lugar es de Hong Kong, con una sorprendente esperanza de vida promedio de 84,9 años. Además, es un centro de finanzas internacional con muy bajos impuestos empresariales, y una de las regiones más seguras, con tasas de homicidio muy bajas en contraste con su alta densidad poblacional.
Quinto está Islandia, que cuenta con altísimos niveles de escolaridad y una esperanza de vida de 83 años.
Con respecto a la Argentina quedó en el puesto 46, tres lugares debajo de Chile, que es el primer país sudamericano en figurar en el ranking. Más abajo, en el puesto 55 se encuentra Uruguay, mientras que Brasil figura recién en el lugar 84.