En los últimos años, el sánguche de milanesa de Tucumán se convirtió en una tendencia gastronómica. Ahora es elegido por los usuarios y viajeros de TripAdvisor. Los datos de la votación de los turistas confirman que ocupa el segundo puesto del podio gastronómico popular. En primer lugar, sigue el asado.
Los homenajes al sánguche de milanesa llegaron en el 2001. Sandro Pereira fue quien realizó su monumento que ese año se vendió por 10 mil dólares en el ArteBa. En 2013, se emplazó una réplica en la esquina de Av. Mate de Luna y Pellegrini de nuestra Capital.
La clave de la cocina tucumana está en el «pan sanguchero», término que sorprende a los turistas. Esa combinación de figaza o pan de viena y pan francés. El pan sanguchero es suave, sin costra y con una miga interior amigable que previamente se tuesta apenas. Esto se realiza para aunar a las cinco capas de milanesas, junto con lechuga cortada como si fuese repollo y rodajas finas de tomate.
En nuestra provincia ya se presentaron diferentes proyectos de Ley para declarar el 18 de marzo el Día Provincial del Sánguche de Milanesa. Esa fecha falleció el famoso José ‘Chacho’ Leguizamón.