Por Edy Cifre, corresponsal Europa para El Federalista
Al día de hoy la cifra asciende a más de 34.000 muertos y decenas de miles de heridos. Miles de edificios colapsados por completo.
Los sobrevivientes, muchos de los cuales no tienen hogar, podrían enfrentar «un desastre secundario» ya que el frío y la nieve provocan «condiciones horribles que empeoran», dijo la Organización Mundial de la Salud.
La actriz Emel Atici de la exitosa novela turca ‘Tierra amarga’ se quedó atrapada por los escombros del edificio en el que vivía junto a su hija, Püryan, que también ha tenido el triste desenlace que su madre. Ambas vivían en la provincia de Adana, al sur del país, una de las zonas más afectadas por el seísmo y que curiosamente es la misma región donde tiene su localización la ficción.
Uno de los complejos más exclusivos de la ciudad turca, una urbanización vertical de 249 apartamentos que presumía de haber aplicado los “más altos estándares de construcción”, se vino abajo con el terremoto.
Por otro lado hoy se suspendían las tareas de rescate bajo los escombros. Numerosas ONG de distintos países se marchaban ya que el gobierno ordenó que maquinas excavadoras iniciarán trabajos de remoción de escombros lo que según los expertos conlleva a que las personas que están aún con vida bajo los escombros corran el riesgo de morir.
De a poco las personas esperan que se los autorice a volver a lo que queda de sus hogares para tratar de iniciar una nueva vida.