El día de ayer, por la noche, cientos de manifestantes quemaron la sede del Congreso de Guatemala para exigir la renuncia del presidente Alejandro Giammatte, tras la aprobación del Presupuesto 2021 que no contempla un aumento para los sectores sociales y por lo que se prevé un gran endeudamiento público.
Desde el Palacio Legislativo se podían visualizar las llamas del fuego que habían encendido. Y esta jornada de protestas, dejó a más de 30 detenidos que fueron enviados a los Juzgados y al menos 22 personas fueron heridas en los enfrentamientos con la Policia Nacional Civil (PNC), según el ministro de Gobernación de Guatemala, Gendri Reyes.

Los manifestantes colapsaron las plaza central, en principio en una marcha pacífica, portando banderas azul y blanco del país y con lemas como “No más corrupcion” y “Se metieron con la generación equivocada”. Y luego, cuando los efectivos policiales llegaron a la escena, empezaron a lanzar gases lacrimógenos a los ciudadanos, donde había niños y jóvenes.
Luego del descontento causado, los guatemaltecos se indignaron con el Congreso y el Gobierno actual que causaban por la opacidad de los recursos para enfrentar la pandemia por coronavirus.
Por otra parte, seguido de estos actos, el vicepresidente Guillermo Castillo, hizo que se conozca que sugirió a Giammattei que ambos renuncien. Ya que fueron parte de la aprobación en el Congreso del Presupuesto 2021 con un monto de casi 12.800 millones de dólares, la mayoría dirigidos a infraestructuras con el sector privado y no prevé aumentos en las carteras de Salud y Educación, ni tampoco se destina para erradicar la pobreza y desnutricion infantil.