El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, comenzó con su nueva candidatura a presidente, intentado conseguir la reelección. Esta apertura fue en un acto de su partido en Río de Janeiro, en el que pronunció un discurso centrado en Dios, las armas y la familia.
Por otro lado, intentó despegarse de las posturas de su principal rival, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Al mando del Partido Liberal (PL), Bolsonaro se presentó como su candidato para la votación del 2 de octubre ante una audiencia de varios miles de personas en el estadio Maracanazinho de Río.
Una de sus frases más destacadas fue: «El Ejército está de nuestro lado», y agregó: «Es un Ejército que no acepta la corrupción, no acepta el fraude. Es un Ejército que quiere transparencia».
Cabe destacar que los mayores abucheos se produjeron cuando Bolsonaro mencionó al Supremo Tribunal Federal de Brasil, cuyos miembros se han enfrentado a los aliados de Bolsonaro por sus denuncias infundadas de fraude electoral.
Por otro lado, el izquierdista Partido de los Trabajadores (PT) nominó oficialmente a Lula el jueves, mientras que el candidato de centro-izquierda Ciro Gomes, que se presenta en un lejano tercer lugar, fue nominado por el Partido Democrático del Trabajo (PDT) el miércoles.