El Gobierno de Alberto Fernández se abstuvo este miércoles de votar la resolución de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que desconoce los resultados de las elecciones en Venezuela. Con 21 votos afirmativos, seis ausencias, cinco abstenciones y dos votos en contra, la OEA aprobó el rechazo a las elecciones parlamentarias encabezadas por Nicolás Maduro en Venezuela, boicoteadas por la oposición y criticadas por Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de América Latina.
En el marco del silencio de Alberto Fernández y del canciller Felipe Solá, el embajador argentino ante la OEA, Carlos Raimundi, se abstuvo en la votación y evitó rechazar los comicios, en los que participó menos del 30% del electorado. El texto habla de una “elección fraudulenta”, con el evidente propósito de “eliminar” la única institución legítima y democrática electa en Venezuela, en concordancia con lo que había denunciado horas antes el Grupo de Contacto Internacional.
La resolución condena “la estrategia consistente y deliberada del régimen ilegítimo de Nicolás Maduro de socavar el sistema democrático y la separación de poderes, incluso a través de la instalación de una entidad no democráticamente electa resultante de las elecciones fraudulentas del 6 de diciembre, consolidando a Venezuela como una dictadura”.
El proyecto de resolución fue presentado por Brasil y contó con el apoyo entre otros de Canadá, Chile, Colombia, Ecuador, Estados Unidos, Guatemala, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela, representada en el foro regional por un delegado de la oposición. “Los pueblos de las Américas tienen el derecho a la democracia y los gobiernos la obligación de promoverla y defenderla”, remarca la resolución.
En este contexto, Michelle Bachelet, Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, aseguró que hubo “presiones e intimidaciones” por parte del régimen de Nicolás Maduro a la población de Venezuela para que fuera a votar el domingo, en unas elecciones que fueron calificadas como “fraudulentas” por 16 países americanos, mientras que Argentina mantiene el silencio ante esta situación.