La Justicia Federal concedió permiso a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner para acceder a la terraza de su residencia mientras cumple la condena bajo arresto domiciliario, al interpretar que ese espacio cumple una función similar a la de un patio de esparcimiento en una unidad penitenciaria.
El Tribunal Oral Federal 2 dispuso que podrá permanecer en la azotea de la vivienda situada en San José 1.111, en el microcentro porteño, por un lapso máximo de dos horas cada día. La ex mandataria continúa allí con la tobillera electrónica que monitorea sus desplazamientos.
Los magistrados consideraron que el uso de la terraza se ajusta a los estándares fijados por tratados internacionales para personas privadas de libertad, y a las prácticas habituales de recreación dentro del sistema carcelario.
Esta autorización se incorpora al régimen de detención en el domicilio que ya se encuentra vigente y será supervisada tanto por el servicio de monitoreo como por los agentes judiciales a cargo del cumplimiento de la pena.
En forma paralela, su defensa presentó un recurso ante la Cámara Federal de Casación Penal contra las restricciones impuestas al régimen de visitas en su arresto domiciliario. La próxima semana se llevará a cabo una audiencia en la que el máximo tribunal penal analizará el planteo que cuestiona el límite de tres personas por encuentro, con una duración de hasta dos horas y un máximo de dos veces por semana.
