Especialistas alertan que los efectos del humo pueden persistir por años, aumentando el riesgo de enfermedades cardiovasculares, respiratorias y cáncer.
Mientras la provincia enfrenta recurrentes problemas de quema ilegal de pastizales y cañaverales, en la capital tucumana esta práctica se replica en barrios alejados del centro y con menor urbanización, donde vecinos queman hojas secas y basura de todo tipo, contribuyendo a los altísimos índices de contaminación que afectan a la región.
A pesar de las constantes denuncias, la situación persiste sin modificaciones sustanciales, generando un riesgo invisible para la salud pública cuyos efectos pueden manifestarse semanas, meses e incluso años después de la exposición al humo.
Efectos inmediatos y a largo plazo
La exposición al humo produce efectos inmediatos como tos, dificultad para respirar, ardor en los ojos e irritación de garganta. Sin embargo, los especialistas advierten que el verdadero peligro radica en las consecuencias a largo plazo.
Según Carlos Baeza, de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, «el impacto de estos episodios no se limita a los días de fuego, sino que sus consecuencias pueden perdurar semanas e incluso manifestarse años más tarde».
Estudios científicos han demostrado que la exposición a las partículas tóxicas del humo incrementa hasta en un 1,8% el riesgo de mortalidad cardiovascular a los diez días de la exposición, y se asocia con mayor incidencia de arritmias, infartos y accidentes cerebrovasculares.
Composición tóxica del humo
El humo contiene material particulado PM2,5 -partículas tan finas que pueden penetrar profundamente en los pulmones y llegar al torrente sanguíneo- junto con compuestos orgánicos volátiles, hidrocarburos aromáticos policíclicos como los benzopirenos, y gases tóxicos como dióxido de azufre y monóxido de carbono.
Cuando se quema basura doméstica, el humo incorpora además metales pesados como plomo, mercurio y arsénico, aumentando significativamente su peligrosidad.
Grupos de mayor vulnerabilidad
Los efectos adversos afectan especialmente a:
-
Niños y adultos mayores
-
Mujeres embarazadas (riesgo de parto prematuro y bajo peso al nacer)
-
Personas con enfermedades respiratorias crónicas (asma, EPOC)
-
Pacientes cardiovasculares
Recomendaciones para la población
Ante episodios de quema, las autoridades sanitarias recomiendan:
-
Permanecer en interiores con ventanas cerradas
-
Utilizar sistemas de aire acondicionado con recirculación
-
Monitorear la calidad del aire a través de fuentes oficiales
-
Evitar actividades físicas al aire libre
-
Usar mascarillas FFP2 o N95 en caso de exposición inevitable
La quema de residuos, lejos de ser una solución inocua, se convierte así en un factor de riesgo silencioso que compromete la salud presente y futura de la comunidad tucumana.
https://www.infobae.com/salud/2025/08/23/el-humo-de-los-incendios-forestales-un-riesgo-invisible-para-la-salud-que-persiste-semanas-y-hasta-anos-despues/