Nada funciona contra la inseguridad en Tucumán. En este caso, la importante inversión en cámaras, la alarma mensual y la empresa de seguridad, no impidieron que el bar Ludwig Burger’s House haya sido robado tres veces en apenas 7 meses sin que la Policía pueda identificar ni detener al responsable.
El último atraco fue hoy jueves a la 1.45 en el local de la esquina de Salta y Santa Fé, en pleno Barrio Norte, minutos después que el encargado cerró y activó las hasta ahora inocuas medidas de seguridad. En el video se puede ver cómo el asaltante, un hombre joven, se sienta en la puerta y espera la desolación para actuar.
Primero patea la puerta y luego, al empujarla, se destroza totalmente el vidrio. En la filmación se puede apreciar cada movimiento del delincuente, quien se dirige a la caja (que ya sabe dónde se encuentra), la que revisa sin hallar nada y se retira rápidamente.
Tras el atraco el propietario realizó la denuncia en la comisaría primera sin que hasta el momento hayan tenido respuestas. La versión de una agente sobre la presunta detención de un joven de similares características al ladrón, en la calle Sarmiento y Junín, en principio generó esperanzas. Pero luego nadie confirmó la versión y hasta el momento no hay sospechosos.
Pero, además de estos contratiempos, los efectivos de criminalística no aparecieron en el local hasta las 19 horas, sin que hayan podido trabajar durante la mañana, la siesta ni la merienda, agravando el daño económico al propietario y los trabajadores.
En el primer robo el atacante logró llevarse 300 mil pesos, hace siete meses. En la segunda oportunidad no pudo llevarse nada porque decidieron ya nunca más dejar dinero en la caja. Ahora tampoco pudo robar, pero los daños causados con la rotura del vidrio implican más de 350 mil pesos para la reposición.
Cabe destacar que el bar se encuentra justo frente al Ministerio de Educación de la Provincia, en la misma manzana donde también está la Brigada de Investigaciones de la Policía de Tucumán.