Hace 10 días, el martes 18 de julio, se desató lo que sería una cadena de fugas en distintas dependencias policiales de Tucumán, provocando una crisis en el Ministerio de Seguridad: en las últimas semanas, se fugaron 17 presos y se produjo un motín en la Comisaría 8va, mientras una encuesta de Meraki anunciaba que la preocupación por la inseguridad creció más de 10 puntos en lo que va del año.
A raíz de eso, Osvaldo Jaldo, vicegobernador y gobernador electo, se reunió con el ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, y con la plana mayor de la Policía de Tucumán, para implementar cambios en la jefatura de algunas dependencias.
En la noche del jueves, se confirmó que los últimos dos de los cuatro fugados de El Manantial habían sido recapturados, en la localidad de Los Nogales, por la Unidad Regional Oeste. Uno de los detenidos, de 20 años, penado por abuso sexual; el otro, de 34 años, es sospechoso de haber cometido un homicidio.
Cabe señalar, que si bien los cuatro prófugos de El Manantial han sido atrapados nuevamente, también se produjeron fugas de la Comisaría Tercera, de la Sexta, de Famaillá y del Destacamento Falivene. En total, quedan cinco prófugos que la policía busca para recapturar.