Aunque el aumento definido por Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) debía llevar el precio de los combustibles a un 4,5% más (unos $11 por litro), las petroleras “estiraron” la suba hasta un 8% en algunos casos.
Mientras el sector privado exigía aumentos pactados por encima del 6%, desde el gobierno insistían con un 4,5% máximo hasta el mes de agosto. Ambas cifras por debajo de la inflación.
Con los aumentos oficiales y según los precios de cada región, cargar nafta en gasolineras de YPF cuesta: $228,50 por litro (nafta súper), $291,90 (nafta premium), gasoil común a $248,60 y gasoil premium a $321,30.
Resta definir qué sucederá con las empresas Axion Energy y Trafigura con respecto a los aumentos de palabra entre el sector privado y el Ministerio a cargo de Sergio Massa.