Por Edy Cifre, corresponsal Europa para El Federalista
Días atrás Ariel Loza y Eduardo Nazar, dos experimentados senderistas salieron como lo hacen habitualmente a transitar las montañas de Tucumán.
La idea era hacer el recorrido desde Raco por Anfama hasta Tafí del Valle, un recorrido de unas 8 horas aproximadamente.
Pero esta vez, algo iba a ocurrir, algo que marcaria la vida de ambos y de muchos deportistas que salen a hacer senderismo por nuestra provincia.
En la subida de la montaña iban juntos Ariel y Eduardo, la subida de 3 km aproximadamente y con una pendiente elevada se la hace en forma de zig zag, y en uno de esos zig zag fue que Ariel cae, sin que Eduardo lo vea. La vegetación es abundante, y la caída de varios metros hizo que ambos queden separados.
En el primer punto de encuentro Ariel no llega y Eduardo piensa que Ariel le sacó ventaja por lo que sigue camino.
Al llegar a Tafí, Ariel no estaba y Eduardo recibe la noticia de que este se comunicó con su hijo por celular en un momento que tuvo señal para decirle que se había caído y abortaba la expedición.
No había podido comunicarse con Eduardo justamente por falta de señal.
Ariel esperaba y Eduardo se desesperaba, junto a varios senderistas, enduristas y rescatistas que se pusieron a buscarlo.
Un accidente con final felíz. Ariel estuvo desde el sábado hasta el lunes en un desfiladero, golpeado e incomunicado. Sin celular, sin provisiones.
El lunes los equipos de rescate dieron con él luego de intensos rastrillajes.
Este accidente nos hace ver que hasta los más experimentados pueden sufrir un percance.
Tucumán maravillosa e infinita, cuenta con innumerables lugares para hacer todo tipo de deportes, está en nosotros tomar todas las medidas para disfrutar y practicarlos a conciencia, respetando la naturaleza y la montaña.