En el interior de la provincia, a unos 80 kilómetros al sureste de San Miguel de Tucumán, previo a que el río Salí desemboque en el embalse del dique El Frontal, se encontraron miles de peces muertos.
Se trata de montones de sábalos muertos que comenzaron a aparecer desde el pasado fin de semana. Los lugareños culpan a la zafra azucarera y a las citrícolas, pero todavía no se confirmaron las razones.
Se cree también que los animales que se acercaron a tomar agua del río se han muerto intoxicados.