Juan Manzur ganó en 14 de los 15 departamentos en donde se impuso el Frente de Todos. Sin embargo, tuvo una desagradable sorpresa cuando del escrutinio provisorio se desprendió una dura derrota: Famaillá.
La Capital de la Empanada, tierra de los Mellizos Orellana, fue lugar del fracaso en las urnas del primer mandatario provincial, que cayó 55% a 44% a manos del vicegobernador Osvaldo Jaldo.

La furia se apoderó del mandatario, pero también la preocupación. Esto último es lo que impulsó a Manzur a movilizarse de manera urgente hasta Famaillá junto con su nueva delfín, Rossana Chahla, para tratar de aminorar un poco la caída.
Manzur y Chahla, sin Pablo Yedlin, tuvieron que inaugurar un nuevo CAPS el día después de su derrota. Un intento desesperado de cara al 14 de noviembre, cuando en las Legislativas deban contar con cada voto perdido para evitar un empate ante Cambiemos, liderado por Germán Alfaro y Roberto Sánchez.
Una foto resume la furia de Juan Manzur contra José Orellana, intendente de Famaillá, por la derrota. Fue publicada en el Twitter del gobernador muestra sin filtros las pocas ganas que tenía de abrazar al jefe municipal.