Buenos Aires.- El gobierno de Axel Kicillof pidió una nueva prórroga para proceder al desalojo de la toma de tierras en Guernica, aunque advirtió que «el tiempo de negociar se está terminando» y las fuerzas de seguridad ejecutarán lo que diga la Justicia.
En la toma, en tanto, sus delegados anticipan que no se irán y que piensan resistir el desalojo.
Este miércoles, 48 horas antes de la fecha límite para el operativo, el ministro de Seguridad de Buenos Aires, Sergio Berni, le pidió al juez de garantías de Cañuelas Martín Rizzo tiempo hasta el 2 de noviembre para proceder al desalojo de la toma de Guernica, a raíz de la lluvia que podría caer.
«Tengo el agrado de dirigirme a Ud. en mi carácter de Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, a fin de solicitarlo que atento a las condiciones climáticas actuales, donde se prevén tormentas intensas en las próximas horas, se evalúe la posibilidad de prorrogar hasta el día lunes 2 de noviembre del corriente año, la medida ordenada oportunamente por el juzgado a vuestro cargo», señaló el funcionario provincial.
En el pedido, Berni también solicitó que se incluyan como fechas posibles para el desalojo «los días sábado 31 y domingo 1 de noviembre de 2020 para llevar adelante las tareas encomendadas».
Por su parte, el jefe de Gabinete de Buenos Aires, Carlos Bianco, advirtió que «el tiempo de negociar ya se está terminando» en la toma de Guernica, donde todavía quedan familias que no quisieron aceptar las propuestas oficiales para retirarse de forma pacífica.
«El tiempo de negociar ya se nos está terminando», expresó el funcionario de Axel Kicillof.
Según indicó, «si la Justicia define que hay que avanzar con el desalojo, la Policía es el brazo ejecutor».
«Nosotros venimos trabajando, para encontrar una forma pacífica de solución, hemos ofrecido un subsidio para que puedan mejorar su hábitat, con materiales», enumeró Bianco en declaraciones al canal A24.
En ese sentido, expresó que «hay algunos intereses que no son solo los de una necesidad de hábitat», ya que dijo que existen «negocios por detrás».
«Es una situación compleja que el Gobierno ya hizo todo y más para tener una salida consensuada. Hay algunas familias que no están dispuestas (a irse), bueno, habrá que esperar la decisión de la Justicia», subrayó Bianco.
Cincuenta mil pesos
Este miércoles el Gobierno bonaerense decidió otorgar un subsidio de hasta 50 mil pesos para desalentar las tomas de tierras sin recurrir a las fuerzas de seguridad, y la medida abrió una polémica con la oposición.
La medida fue plasmada en el Boletín Oficial de la Provincia de Buenos Aires a través del decreto 938/2020, cuyo objetivo es crear un «Programa de Asistencia Crítica y Habitacional», por el cual se asistirá y otorgará fondos a las personas y familias en «extrema vulnerabilidad social», con el fin de atender los problemas habitacionales.
El programa en cuestión será llevado adelante por el Ministerio de Desarrollo de la Comunidad Bonaerense, a cargo de Andrés «Cuervo» Larroque, funcionario que desde un primer momento quedó al frente de resolver el conflicto de las tomas de tierras, que se multiplican por todo el territorio provincial.
Van a resistir
También este miércoles, ocupantes del predio tomado de Guernica negaron que la mayoría de las familias se haya ido del lugar y advirtieron que van a «resistir» el desalojo previsto para los próximos días. «Es mentira que la mayoría se haya ido de acá como se dijo en diarios y noticieros. Incluso hubo gente que se había ido y ahora volvió para resistir el desalojo que sería en unos días», sostuvo Juan, uno de los delegados de la toma, en declaraciones a un matutino porteño.
Juan, además, sostuvo que en las asambleas de los últimos días en la toma se votó a favor de «resistir» el desalojo, y agregó: «Hay muchos chicos, mujeres, va a ser complicado el tema del desalojo». A su vez, dijo que desde el lugar en el que se encuentra no se llega a ver la presencia de policías desplegados, luego de que el ministro de Seguridad bonaerense, Segio Berni, informara que movilizó a 4.000 efectivos a la toma de Guernica.
Por otro lado, Juan criticó la presencia en el lugar de representantes de partidos y agrupaciones de izquierda y sostuvo que los ocupantes los «echaron» porque estaban intentando «convencerlos» de que abandonen la toma.