Lionel Messi, uno de los mejores jugadores de fútbol de la historia, no vería mal cambiar de aire y esto sin dudas es una sorpresa. La posible partida de su amigo, el uruguayo Luis Suárez, podría sumar un poroto más a las ganas de Leo de continuar su carrera en otra liga. Algunos Barcelonistas presagian al Inter de Italia como un posible destino. Según se supo, el jugador argentino se habría comprado un inmueble en Milán y eso podría ser un indicio del futuro del crack rosarino. Todos saben que su sueño es ganar un mundial y el hecho de que el delantero del equipo italiano sea el delantero de la selección argentina Lautaro Martínez, sería otro aliciente para lograr un mayor entendimiento en el campo de juego y llegar con más rodaje al mundial de Catar 2022. El tercer punto, no menos importante, sería que su rival personal de toda la vida, Cristiano Ronaldo juega en Juventus, en la liga italiana, el fútbol es un negocio y esa rivalidad vende mucho.
El periodista brasileño Marcelo Bechler, el mismo que anunció la partida de Neymar a PSG en 2017, asegura que Lionel Messi le comunicó a la directiva del Barcelona, presidida por Josep María Bartomeu, que no seguirá en la temporada 2020-21.
Según Bechler, que cita una fuente dentro del mismo FC Barcelona, Lionel Messi ya no cree en el próximo proyecto. Es por eso que buscaría su salida a un año del término de su contrato, en junio de 2021.
“Nunca vi a Messi tan fuera del Barcelona en tantos años aquí adentro como ahora”, le revelaron a Bechler desde el seno del club azulgrana. El rosarino dejaría el club catalán tras casi 20 años.
La citada fuente no descarta que Lionel Messi cambie de opinión con los días si sus compañeros lo convencen de desistir. Sin embargo, al día de hoy, la intención del argentino es clara: se va del Camp Nou en búsqueda de un nuevo proyecto que Josep María Bartomeu ni su directiva le han podido dar.
Cabe recordar que Messi tenía la potestad de decidir su futuro hasta antes de mayo de este año. Sin embargo, el argentino se quedó callado y el club catalán asumió que seguiría al menos hasta el final de su contrato. Las negociaciones por una renovación se han estancado hace meses.