Durante la noche del 1 de agosto, un joven de 22 años llamado Cristian Herrera que vivía en La Costanera, se suicidó por una fuerte depresión que le producían las drogas. Distintos especialistas que trabajan en la zona aseguran que esta zona, está golpeada por el alto consumo de pasta base y como estas adicciones, cada día afecta a más menores de edad que viven por ese barrio.
La familia de Cristian solicitó a la comisaría de su respectiva zona y a Defensa Civil de Tucumán que les concedan el sepelio gratuito que brinda el gobierno a las familias humildes. Cuando los empleados de la funeraria llegaron, pusieron el cuerpo de Cristian en un cajón de cartón, esto despertó la indignación del ambiente cercano al joven, que inmediatamente denunció el hecho por redes sociales.
Cuando llegaron al cementerio, los encargados del lugar dieron a conocer que no podían enterrar a Herrera allí y le ofrecieron comprar un cajón de madera para poner los restos de Cristian.
El titular de Defensa Civil, Fernando Torres, dijo que se brindó el servicio pero en ningún caso se daba de entrega un cajón de cartón, y le dio la responsabilidad al Ministerio de Desarrollo Social con Gabriel Yedlin al frente, ya que los contratos con estas empresas son realizados por el ministro. Tanto Yedlin como el gobernador, Juan Manzur, pidieron que se realicen las acciones correspondientes para investigar el porqué de la empresa de dar este servicio.